viernes, 20 de febrero de 2009
El juego de las 7 diferencias
Allá por 1991, Flor empezaba salita de dos en el jardín. Y acá luce, ansiosa, antes de empezar las clases, con el delantalcito celeste y la bolsita pintada a mano (por mí, ¿quién más?) con su personaje favorito, Kitty.
El tiempo pasa, y a pocos días de empezar Medicina, Flor también espera ansiosa con su delantal nuevo, su pinza de disección y sus guantes descartables.
Diferencias hay varias. Pero la sonrisa... siempre presente. ¡Qué sigas así, Floripondia! Te quiero.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Qué pinta de doctora, Flor! No me imagino cuántos pacientes van a querer atenderse con vos! Ya veo la escena...con otros médicos llamando a los pacientes, y éstos diciendo: "No, yo me quiero atender con la rubia esa, la de la sonrisa". Un beso y muchos éxitos!
ResponderEliminarMIGUEL
Mi Querida Flor:Creo que esa foto con tu delantalcito celeste fue tomada en mi balcón.Por lo tanto ahora mientras espero la foto con tu título de galeno sería lindo sacar una con la misma sonrisa de siempre que ilumina esa hermosa carita en este mismo lugar y con tu flamante delantal blanco.Te quiero mucho y te deseo toda la suerte del mundo.Tu Abu Sonia
ResponderEliminar